El aguacate o el mango ya se han adaptado con generosidad a la Axarquía malagueña, pero en el futuro veremos que nuestros mercados y fruterías se llenan de extrañas frutas, exóticas y extraordinarias, que hoy solo pueden ser importadas desde países lejanos.

De esta profusión de productos subtropicales es en buena medida responsable la Finca La Mayora, el Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea (ISHM), centro de investigación situado en Algarrobo, y especialmente los agricultores de la costa oriental de Málaga, que ofrecen productos de gran calidad al mercado.

La carambola

Carambola, una fruta exótica que se produce en la Axarquía. Foto: Eduardo Francisco Vázquez

La carambola, posee una estética forma de estrella anaranjada que se cultiva en la Axarquía malagueña, único lugar de Europa continental. Habitualmente se importa de América y Asia, pero debido al transporte que requiere se recogen verdes en origen, para que lleguen en condiciones a España. En la Axarquía se recoge en el momento óptimo, por lo que maduran en su árbol. La campaña de recogida se extiende desde octubre (las variedades más tempranas) hasta marzo.

La carambola contiene agua en abundancia y pequeñas cantidades de hidratos de carbono simples y aún menores de proteínas y grasas, por lo que su valor calórico es muy bajo. Su pulpa es rica en oxalato de calcio y fibra soluble. Contiene una cantidad moderada de provitamina A y de vitamina C. En cuanto a minerales, destaca el potasio.

La papaya

Papaya. Foto: prettywar-stl

La papaya, de gran poder antioxidante, posee unas propiedades alimenticias similares, por ello se recomienda para las personas mayores, con problemas dentales o con estómago rebelde y digestiones pesadas, ya que la pulpa de la papaya es fácil de masticar y digerir. Su cultivo es delicado ya que presenta gran sensibilidad al viento y a virus, por lo que se consiguen mejores resultados bajo plástico.

El longan

Fruta longan expuesta en un mercado de Manila. Foto: chotda

El longan se presenta como una fruta pequeña (como una pelota de pimpón). Su sabor rememora la uva y al melón. Se la conoce como ojo de dragón por su aspecto blanco y translúcido debido a su carne, en la que asoma un hueso negro a modo de hipnótico ojo. Aunque originaria de Asia ha conseguido aclimatarse, con excelente rendimiento, en la localidad de Algarrobo en la Axarquía malagueña. Se trata de un potente proveedor de vitamina C para nuestro organismo e incrementador del vigor sexual.

El lichi

El lichi, de origen chino con curiosas propiedades por su alta proporción de polifenoles, que favorece el riego sanguíneo, y una alta tasa de vitamina C. Ya se plantaba en la Axarquía en los años 90 del pasado siglo, pero la producción fracasó porque la variedad utilizada (mauritius) no resultó aprovechable. Hoy se investigan como más adecuadas para la comarca, las variedades bengal, kwai-may-pink, salathiel y wai-chee.

La lúcuma

Fruta lúcuma. Foto: Ngo Duy Thuong

La lúcuma, un fruto de piel verde y origen peruano, se conoce como “oro de los incas” por el color amarillo mostaza de su pulpa. De momento, sólo existe una plantación, la única en Europa, que se encuentra en la finca La Mayora de Algarrobo. Su futuro en la Axarquía es halagüeño, ya que posee elevadas propiedades nutritivas y resulta exquisita para preparar helados, batidos y otros tipos de postres. Tiene un sabor dulce recuerda a la batata con un regusto final a fruto seco. El precio es elevado, ya que debe ser importado desde Perú.

El zapote

Zapote negro. Foto: mariaelaina78

El zapote, por su parte, aún en periodo de aclimatación en el ISHM de La Mayora donde ya se han obtenido elemplares de la variedad negra. Se conoce como Chocolate Pudding Fruit, ya que el fruto posee una apariencia de chocolate, de textura cremosa y sabor a mousse de chocolate.

La pitaya

La pitaya, un suculento cactus muy resistente a las sequías, también llamada fruta del dragón, es idónea para las personas con sobrepeso o a dieta ya que se presenta rica en vitamina C, betacarotenos, fósforo, calcio y hierro.